Auto-realización ¿Por dónde empiezo?
La pregunta es sencilla y para ponernos en movimiento solo se requiere de nosotros mismos. Entonces, ¿por qué no estamos ya siguiendo el camino hacia la auto-realización? al menos no de manera consciente y planeada.
¿Por dónde empiezo? Empieza por definir un objetivo con el mayor detalle posible. No se trata de decir lo primero que se nos ocurra. Se trata de definir un objetivo que sea producto de una reflexión “a conciencia”. Extrañamente para ello debemos de acceder a nuestro “subconsciente” y hacernos preguntas que no nos hacemos todos los días y sobre todo darnos respuestas libres de distorsiones.
Esto es un proceso retador y requiere de nuestra atención. No vamos a conseguir la auto-realización solo porque un día tuvimos un “momento de inspiración”. Lo que algunos pueden concebir como “momento de inspiración” seguramente fue el resultado de muchos momentos previos de reflexión.
Para echar a andar esta reflexión puedes empezar por algunas de las siguientes preguntas: ¿qué quieres lograr? Es necesario describirlo a detalle, ¿cómo lo quieres? Por ejemplo: ¿cómo va a ser tu oficina? ¿Cuál va a ser tu rutina de trabajo? ¿Quién será tu socio o compañero de trabajo? ¿A qué te vas a dedicar? ¿Tendrás un negocio o vas a trabajar en un empresa? ¿Qué tipo de empresa? ¿Cuáles van a ser tus funciones o cuál será el giro de tu negocio? ¿Cuánto dinero vas a ganar? ¿Cuál es tu plan o qué pasos necesitas dar para lograrlo? ¿cuándo lo vas a hacer? ¿En qué o quién te vas a convertir cuando lo consigas? ¿Qué decisión estás tomando? ¿Cómo sabrás que lo has logrado? ¿Es sano perseguir tal objetivo? Entre otras.
Definir el objetivo que nos llevará a la auto-realización es el producto de un esfuerzo que va mucho más allá de responder preguntas o leer este breve artículo o incluso libros enteros sobre el tema.
Volviendo a la pregunta inicial, “si solo depende de nosotros, ¿por qué entonces no estamos ya en camino hacia la auto-realización?
Quizás porque todavía tenemos que asumir el reto, asumir el compromiso, con nosotros mismos, de hacer lo que tenemos que hacer para lograrlo.
¿Te atreves? ¿Asumes el reto? hazlo entonces!
